
El Dr. Miles S. Faith, profesor de asesoramiento y psicología en la Universidad de Buffalo, destaca la importancia de que los padres inicien una conversación con sus hijos para combatir el aumento de peso. Obesidad se ha vuelto extremadamente común entre niños y adultos, y está claro cuán graves pueden ser las consecuencias.
La discusión sobre la obesidad y la pérdida de peso con niños y adolescentes debe ser tratada con mucha cautela, ya que requiere mucha paciencia y la elección correcta de las palabras. Una conversación inoportuna puede causar una percepción poco saludable del tema, que puede arraigarse en la mente de los niños y afectarlos incluso después de años. También pueden desarrollar malos hábitos alimenticios que pueden ser peligrosos para su bienestar mental y físico.
Ya sea que el niño haga una oferta o que los padres decidan intervenir, deben trabajar juntos como un todo para fortalecer las habilidades de los niños y mejorar su salud.
¿Cómo tocar con seguridad el tema de la pérdida de peso?
nastya_gepp / Unsplash: elige el momento adecuado para iniciar la conversación
Elija el momento y el lugar adecuado para que el niño se sienta seguro y no quiera hablar y discutir sus problemas. Recuerde, no necesitamos predicar; Tenemos que hablar.
Compartir ideas y respetar las opiniones de los niños les hace sentirse responsables e incluso asumir responsabilidades. Sería mejor iniciar una conversación si ambos se sienten relajados, tal vez. Tal vez podría hablar mientras toma una taza de té o en la tarde cuando los niños se sienten más ventosos.
No agregue estrés mental al niño.
Yiorgos GR / Shutterstock: Tenga cuidado al hablar con los niños, la elección incorrecta de las palabras puede afectar su autoestima
Los padres y tutores deben entender lo importante que es no usar palabras negativas asociadas con la pérdida de peso. Es mejor no usar palabras como «dieta», dice la Dra. Faith. Dichos términos pueden ser mentales y conductuales para los niños. Asegúrese de tener una perspectiva positiva sobre el tema, ya que esto sería lo mejor para los niños que luchan con problemas de autoestima.
Haz que los quisquillosos elijan opciones más saludables
¿Es posible obligar a los niños a subirse a la balanza?
Puede pesar a sus hijos para controlar su progreso, pero asegúrese de animar al niño y decir «buen trabajo», independientemente del número en la balanza. Solo así el niño sentirá la capacidad de hacerlo mejor y trabajar en su salud.
Un pequeño aumento de peso es perfectamente normal, recuerda: crecen. Trate de observar los cambios en su comportamiento, como cuántas horas duermen y cuánto ejercicio hacen para comprender mejor su salud. ¡También ayudará si establece objetivos y los recompensa cuando se logran los objetivos!